El interrogatorio de hoy no va a poder tener lugar en La sala de interrogatorios por dos motivos: primero porque la calefacción sigue haciendo de las suyas y van a aprovechar que la primavera ya ha llegado para iniciar las obras y arreglarla de una vez por todas. Y segundo porque el detenido, Mikel Santiago, se encuentra en arresto domiciliario y era más fácil acercarme a su domicilio que iniciar todos los papeleos para traerlo a comisaría. Además, tenía curiosidad por conocer el hogar de un verdadero criminal.
¿Quién es Mikel Santiago?

- Alias: Mikel Santiago
- Procedencia: Portugalete
- Ambiente en el que se mueve: Novela de suspense y Thriller
- Sospechas contra él: La última noche en Tremore Beach, El mal camino, El extraño verano de Tom Harvey, La isla de las últimas voces
- Centro de operaciones: mikelsantiago.info
- Canales de comunicación:
- Twitter: @mikelsantiago
- Facebook: Mikel Santiago
- Instagram: @MikelSantiago
Antes de llamar a la puerta de Mikel Santiago, activé y guardé una grabadora en el bolsillo de la chaqueta para poder dejar constancia de lo sucedido y que pudieras leer lo que tenía que contarme. Por si acaso, me guardé una segunda grabadora en el tobillo, dentro del calcetín.
Un criminal de altura
Probando, probando. Vale, el indicador de sonido se mueve, esto funciona. Aquí el inspector Moreno a punto de entrar en la casa del acusado, Mikel Santiago. A ver en qué piso es… Santiago, Santiago… Ah, aquí, El noveno B. Vaya, el piso ideal para un oculista. Mierda ¿Por qué siempre se me ocurren estos chistes cuando estoy solo?
¿Diga?
¿Mikel Santiago? Aquí el inspector Moreno, yo… Me ha abierto, voy para arriba. Espero que tengan ascensor.
Señor… Mikel… Santiago…gracias…por… ¡Dios! … nueve… pisos… a pie… estoy muerto. ¿Podría darme…un vaso…de agua? Y un sitio donde… sentarme.
Claro, adelante. ¿Agua con gas? ¿Natural? ¿Algún veneno favorito?
Gracias, ya estoy mejor. No sé cómo puede subir tantos escalones a diario. Pensaba que en un edificio tan moderno habría ascensor ¿Qué problema tienen ustedes?
Será con veneno entonces…
Rompiendo el hielo
En la Sala de Interrogatorios tengo la costumbre de tutear a los acusados. Pero como no estamos allí prefiero preguntar antes ¿Te importa que nos tuteemos? Usted decide. Su casa, sus reglas.
Tutéeme.
Perfecto. Antes que nada permíteme que te haga la pregunta que dejó el anterior inquilino de La sala de interrogatorios, David Verdejo:
«Pregúntale a quien tenga la insensatez de sentarse aquí si es más de café de máquina o prefiere esperar a encontrar cualquier bar abierto.»
Soy de esperar el bar. Café de máquina nunca.
Inicio del interrogatorio
Comencemos con el interrogatorio en sí. Te encuentras recluido en arresto domiciliario por tu implicación en el caso “Mc Guffin”. ¿Por qué inmiscuirse en algo así? ¿Qué tiene el mundo del crimen y el suspense que no tengan otras historias?
Disfruto metiéndome en líos muy graves con consecuencias terribles. Creo que mi vida sería muy aburrida sin ellos.
Viendo el interior de tu vivienda, diría que no te ha ido mal del todo. Sé que te gusta cometer tus propios crímenes, pero también disfrutas con los de los demás. ¿Te sientes más lector o escritor?
Me siento un lector afortunado que a veces puede intentar emular lo que más le gusta leer.
Sus inicios como criminal
¿Recuerdas cuándo fue la primera vez que alguien en público se refirió a ti como escritor? ¿Qué sentiste?
Empecé a dar saltos y a gritar hasta que un vecino dio un golpe en la pared. Ahora en serio, se necesita mucho tiempo para escribir decentemente y que tus textos convenzan a otros lectores. Es un gran día cuando alguien te da una enhorabuena honesta por algo que has escrito.
Los cuatro crímenes de Mikel Santiago
Hasta ahora te has dado la gran vida para tus crímenes: Irlanda, la campiña francesa, la costa italiana y la última en una isla del mar del norte ¿Por qué? ¿Has estado físicamente en esos lugares?
He vivido, visitado o googleado todos los lugares que aparecen en mis novelas.
A partir de ahora sólo tendrás a San Google o tu próximo crimen sucederá dentro de una casa, ya que llevas meses encerrado aquí. ¿O pretendes localizarlo en otro lugar? Ten en cuenta que tus palabras podrán ser usadas ante un juez.
Mi siguiente novela estará ubicada en un pueblo imaginario de la costa vasca.
Bien pensado, para la imaginación no hay rejas ni paredes.
Todavía no me he puesto con el informe de tu último crimen, “La Isla de las últimas voces”. Lo tengo en casa, pero es tan grande y suelo leer de camino al trabajo, que me es un poco difícil transportarlo. ¿Qué tal está siendo la recepción de esta nueva historia? ¿Algo que te haya hecho especial emoción?
Va muy bien. Fue mi gran apuesta por escribir un thriller puro y la recepción ha sido genial. Tengo la suerte de que mis lectores se suelen leer todo lo que escribo.
Sé que todos los delincuentes decís lo mismo pero después de cuatro crímenes ¿De cuál guardas mejor recuerdo?
Tremore Beach fue mi primera novela y una gesta. El Mal Camino fue una novela que escribí obsesivamente y me transportó a estados mentales muy extraños.
Entonces, Tremore Beach, apuntado.
Cómo escribir un crimen
¿Qué parte de escribir un crimen es la que más te cuesta (planificación, documentación, desarrollo de personajes…)?
Soy un escritor bastante intuitivo y confío en el trabajo diario y la re-escritura constante. Todas las novelas tienen un mes terrible en el que te arrastras por el lodo hasta que respondes a las preguntas fundamentales de la historia. Desde ese momento solo quedan 10 o 12 meses de mucho trabajo. Es todo muy divertido.

Venga, Mikel. Alégrame el día y cuéntame algo de los nuevos crímenes que están por venir. Off the record, por supuesto.
Un quién-lo-hizo en la costa vasca. Ocurrirá durante una noche de San Juan.
Buf… de las noches de San Juan lo único que recuerdo son unas resacas terribles. Espero que tus personajes lo lleven mejor porque si no el crimen quedará sin resolver.
Otras actividades criminales
¿Sabes? Aunque no lo parezca tenemos cosas en común. Yo también he sido programador, toco la guitarra desde hace años y me gusta el mundo del crimen ¿Con qué disfrutas más?
Te contaré un secreto: escribo programas desde que tenía 13 años y ahora que ya no estoy tan activo, me encanta pasarme alguna tarde suelta programando un juego o algún algoritmo divertido. Lo siguiente, desde luego, es irme con mi banda a tocar una noche por ahí.
Ya veo… los músicos sois delincuentes de otra calaña, embaucadores que están peor vistos, incluso, que los escritores. Pero tú eres ambas cosas ¿Cómo lo complementas? ¿Bebe una actividad de la otra?
Todas las artes y habilidades se retroalimentan y la música y la escritura son dos hermanas que se llevan fantásticamente bien.
¿Has conseguido vivir en exclusiva de tus actividades criminales o todavía tienes que realizar algún trabajo honrado para poder comer a diario?
Hoy por hoy, me dedico a escribir.
Vamos, que estás decidido a seguir delinquiendo y alejarte del Mikel Santiago respetable que una vez fuiste.
Mentor de futuros criminales
He escuchado que has empezado a enseñar a futuros criminales las artes del crimen en Escuela Cursiva ¿Qué tal está siendo la experiencia de mentor?
Ha sido muy divertido y me ha ayudado a aprender un montón de cosas a mi mismo. He identificado mis propios instintos y les he dado un nombre. Y creo que los alumnos se lo han pasado genial también.
Ahora tendremos que empezar a fichar a futuros criminales. ¿Podrías ayudarme y darme el soplo de algún criminal poco conocido al que consideres que debamos seguirle la pista?
Hombre, seguid a Blas Ruiz Grau.
Ese es un criminal de la peor calaña que existe. Lo tenemos bien vigilado para que no haga de las suyas, pero es muy escurridizo.
¿Cuáles son tus referentes del mundo criminal? ¿Qué estás leyendo ahora mismo?
Leo de todo, no solo novela negra. Ahora mismo estoy con Carrere y su biografía de Philip. K. Roth

Fin de la jornada laboral
Al igual que hizo David Verdejo contigo, podrías dejarme aquí alguna cuestión para el próximo criminal que pase, esta vez de verdad, por la sala de interrogatorios?
“¿Cuál es tu auto-insulto preferido cuando te bloqueas?”
Bueno, creo que por la hora que es ya puedo dar por finalizada mi jornada laboral. Gracias por tus respuestas. Me has caído bien, hablaré con el juez para que te deje salir de vez en cuando a pasear por la Ría.
Que Elvis te bendiga por ello.
Y ya que estoy aquí ¿no tendrás una guitarra de sobra para que improvisemos un rato? Todavía no me veo con fuerzas de bajar todas esas escaleras.
Mmmm.. venga, abro una botellita de vino y tu vete afinando. ¿Te acuerdas de algún blues viejo para empezar?
Y hasta aquí el interrogatorio a Mikel Santiago, al que estoy muy agradecido por acceder a mis preguntas y por la botella de vino que sacó mientras tocábamos un poco de blues. En realidad él tocó y yo bebí, pero lo hicimos en equipo.
¿Te ha gustado la entrevista? ¿A ti también te ha invitado Mikel Santiago a una botella de vino y quieres contarlo? ¿Cuál es la novela que más te gusta de Mikel? Sea lo que sea, déjamelo aquí abajo en los comentarios o comparte la entrevista en tus redes.
Ahora si me disculpas voy a calzarme las zapatillas que necesito ponerme en forma para poder atrapar a más criminales en el futuro.